Estantarte “antiguo” Hermandad de San Juan Evangelista
Estandarte o pendón
Número de inventario
DESS01206
Clasificación genérica
Textil
Materias
Seda, Hilaturas
Técnicas
Bordado, Cosido
Forma de ingreso
Depósito temporal
Titular del depósito
Hermandad de San Juan Evangelista de Hellín
Nombre específico
Tipología
Uso/Función
Simbólico, Representativo
Alto
100
Ancho
65
Longitud
Procedencia/hallazgo
Contexto cultural
Época Contemporánea
Datación
c. 1930
Autor/Taller
Desconocido
Lugar de producción
Desconocido
Descripción
Pendón de estandarte vertical con forma rectangular y rematado en dos picos, casi de tipo gallardetón.
En el lado superior tiene ocho cintas cosidas a modo de vainas para sujetarlo con vástago.
Está confeccionado en seda de color blanco, sobre la que se disponen diferentes bordados en hilo dorado y varias técnicas y un emblema central, de forma ovalada, compuesto por una tela de seda de color verde sobrecosida a la blanca y sobre la que se dispone el motivo central iconográfi co, también bordado, un águila que posa una de sus garras sobre un evangelio. Aparecen escritas en él las palabras “INITIUM SANCTI EVANGELII SECUNDUM JOANNEM”, referidas al inicio del evangelio de Juan.
Alrededor del emblema se desarrollan bordados en hilatura dorada con motivos vegetales idealizados.
Clasificación razonada
El estandarte es la insignia que representa corporativamente a la hermandad en todos los cultos que esta celebra o aquellos a los que asiste. En todos ellos, esta pieza se sitúa siempre en un lugar preeminente sobre el resto de insignias.
En sus orígenes recibía el nombre de guion y consistía en un paño que colgaba de un travesaño, de forma rectangular, abierto desde la mitad, en forma de triángulo, y en cuyo centro figuraba el escudo de la cofradía. De aquellos primeros estandartes a los de hoy hay grandes diferencias, que afectan más a lo estético que a su función representativa. En la actualidad dispone de un diseño más elaborado y con una ornamentación más o menos profusa dependiendo de la idiosincracia de cada hermandad. En su mayoría están elaborados en terciopelo –normalmente del color corporativo– y presenta el escudo de la cofradía bordado en oro o sedas de colores en la zona central. En algunos casos, estos bordados se completan con otros adornos vegetales o simbólicos que hacen alusión a algunos de los títulos de la hermandad o a su historia. Esta tela se suele unir a un asta en metal que está rematado por una cruz, quedando recogida con un cordón de oro o seda con borlas y llevando en su interior una estructura para que el escudo quede a vista de todos.
El estandarte suele tener una ubicación fija dentro del cortejo procesional. Es portado por un hermano vestido de nazareno. Normalmente encabeza el último tramo antes de la presidencia de la imagen titular.
Iconografía
El símbolo de la Hermandad, y de San Juan Evangelista, es el águila. Iconográficamente los cuatro autores de los Evangelios (San Mateo, San Marcos, San Lucas, y San Juan) han sido representados tradicionalmente en forma de tetramorfos, siendo el águila la figura asociada a San Juan, ya que su Evangelio es el más abstracto y teológico de los cuatro. El águila representa a Juan por el hecho de que esta ave se considerada un animal sabio y clarividente, que cuando vuela mira de forma directa al sol, y el Evangelio de Juan es más abstracto y teológico que el resto.
Según Deuteronio (21: 6-8), el lavatorio de manos sería un rito hebreo, ya que después de un asesinato, los judíos incriminados se lavaban las manos para confirmar su inocencia.
Conservación
El grupo presenta un estado de conservación regular. Se observan deterioros y decoloraciones en la seda, y una aruga central quizá producto de haber sido almacenado doblado.